Ahorra energía y dinero en tu calefacción

La individualización de los consumos de calefacción es una medida enfocada al ahorro de energía ya que se entiende que al dotar a la instalación de calefacción de sistemas que permitan medir de forma individual el consumo de calefacción se fomenta un uso más racional de la energía por parte del usuario.

¿Cuándo son necesarios los sistemas de medición individual de la calefacción?

Se calcula que en España hay cerca de 1,7 millones de viviendas con instalaciones centralizadas de calefacción, característica que se relaciona con derroche energético, ya que se emplea mucha más energía para calentar el edificio que la que se necesita. Por eso, son necesarios estos sistemas de medición, que permitan hacer un uso más racional de la energía y pagar por la energía que se consuma.

Existen varias formas de medir el consumo de calefacción central:

  • Contadores de energía: Estos sistemas de medición individual se instalan en edificios que cuentan con instalaciones centralizadas en anillo, es decir que cuentan un único punto de entrada y un único punto de salida de las tuberías de agua caliente para cada vivienda, por lo que el contador de energía se instala en cada vivienda y de esta manera se realiza una lectura del consumo de energía que se realiza en la misma.
  • Repartidores de costes de calefacción: En instalaciones de calefacción centralizada por columna, debido a la forma de distribución del agua caliente a través del edificio, no es posible instalar contadores individuales y la forma de medir el consumo de calefacción es mediante la instalación de repartidores de costes en los radiadores. Su instalación se perfila como la mejor vía para medir el consumo de calefacción de forma individual ya que no requieren obras para su montaje ni modifican la instalación de calefacción y permiten repartir proporcionalmente el consumo de calefacción que se produce en el edificio.

¿Hay obligación de instalar repartidores de coste de calefacción?

Se preveía que la instalación de repartidores de coste de calefacción iba a ser obligatoria a partir del 1 de enero de 2017 según se aprobara la directiva europea de Eficiencia Energética 2012/27/UE al ordenamiento jurídico español. Sin embargo la transposición parcial de esta directiva en el Real decreto 56/2016, del 12 de febrero de este año ha dejado el tema de los sistemas de medición individual de consumo en las calefacciones centrales en stand by. Se prevé que por fin este 2018 se apruebe el RD que regulará la contabilización del consumo individual de calefacción.

Desde el Consejo de los Colegios de Administradores de Fincas Colegiados recuerdan que pese a no haberse aprobado la obligatoriedad de instalar estos sistemas de medición en la Directiva si se establecen las sanciones para el supuesto de no instalar los contadores de calefacción -Artículo 80.2.C- Real Decreto-Ley 8/2014, de 4 de julio, y plantean que la transposición parcial supone a los Administradores de Fincas Colegiados una situación de incertidumbre y que para paliar esta situación la trasposición total debería aprobarse a lo largo de 2016.

Además, desde la Dirección General de Industria y Minas de la Comunidad de Madrid recomiendan, pese a no ser obligatorio, su instalación ya que “en edificios existentes con instalaciones de calefacción centralizada es muy aconsejable la instalación de repartidores de costes junto con válvulas termostáticas en los radiadores, puesto que es una medida de gran racionalidad técnica y rentabilidad económica”.

Más ahorro de energía con válvulas termostáticas

Las válvulas con cabezal termostático son válvulas que, instaladas en los radiadores, permiten su regulación automática, manteniendo la temperatura constante deseada en cada habitación. Si se producen cambios de temperatura, el cabezal reacciona automáticamente abriendo o cerrando la válvula para mantener la temperatura constante.

Si además, a la individualización del consumo de calefacción se le añade otro componente de regulación como es la instalación de válvulas termostáticas en radiadores, se incrementa el ahorro de energía. Según cálculos del IDAE el ahorro de energía para el conjunto de los usuarios con el reparto individualizado de los gastos suele ser superior al 30%.


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