Es una evidencia que a nadie le gusta levantarse por la mañana y encontrarse con que no tiene agua caliente o bien que su casa se encuentra fría a última hora de la tarde porque la caldera ha dejado de funcionar. Como esto es algo que desgraciadamente sucede en ocasiones, en este artículo del blog de Tecnigrado vamos a repasar los diez problemas técnicos más comunes que puede sufrir una caldera y cómo podemos solventarlo.
- Baja presión de la caldera: Este problema se puede identificar rápidamente. Deberás mirar el manómetro o bien en el display para saber si la presión del sistema ha bajado hasta cero. La presión debe estar siempre entre 1.5 a 2 bares. Si la presión es menor a 1 la caldera no podrá funcionar o dará error. En ese caso deberás llenar el sistema hasta la presión ideal. Este tipo de problemas pueden ser causados por una pérdida en el sistema debido a un goteo, por lo que además es conveniente purgar los radiadores. Si tras haber realizado estas comprobaciones cada dos por tres la caldera pierde presión es mejor llamar a un técnico especialista en calderas, ya que puede deberse de otros problemas más complejos.
- Sin calefacción o agua caliente: Esto puede ser bastante irritante y frustrante cuando la caldera no da calor o agua caliente. Esto puede ser debido por varias razones, desde válvulas motorizadas defectuosas, el vaso de expansión roto o el termostato estropeado, por poner solo algunos ejemplos. En cualquier caso, lo más recomendable es ponerse en contacto con una empresa de mantenimiento que haga un diagnóstico adecuado y correspondiente reparación.
- Goteo o pérdida de agua: Una fuga de agua en la caldera puede deberse a una avería de algún componente interno; puede que la válvula de seguridad haya hecho su función al haberse aumentado la presión. Las fugas también pueden darse en el circuito de calefacción y no nos hayamos dado cuenta de que en algún punto la instalación ha empezado a gotear lentamente y la presión del sistema se haya visto comprometida.
- Tuberías de condensados congeladas: Este problema es más común en zonas donde las temperaturas suelen estar bajo cero de forma constante durante largos periodos de tiempo. Las tuberías de los condensados son responsables de transportar el condensado desde la caldera hasta el drenaje exterior. Si se congelan, esto provoca un tapón impidiendo la evacuación y provocando que el flujo de condensado vaya hacia la caldera.
- Calderas que no responden a las funciones del termostato: El mejor aliado o el peor enemigo cuando deja de funcionar o es muy sofisticado. Normalmente los termostatos se descoordinan en los cambios de horario, por lo que será necesario comprobar este aspecto. Cuando a pesar de tener el horario en regla el termostato no muestra las letras o no se activa automáticamente, puede deberse a que necesite un cambio de pilas. Si tras realizar estas pequeñas comprobaciones básicas el termostato sigue sin funcionar, lo más recomendable es llamar a un técnico especialista.
- Ruidos de goteo, golpes o silbidos: Es normal que las calderas hagan algún tipo de ruido cuando están en funcionamiento. Pero si la caldera emite sonidos inusuales es mejor llamar a una empresa de mantenimiento, ya que por lo general los ruidos pueden ser causados por aire dentro del sistema o una bomba defectuosa.
- Fallo de los radiadores: Si tras el parón del verano al encender la caldera para la calefacción notamos que algunos radiadores no calientan y están fríos es posiblemente debido al aire que ha entrado en el sistema. Será necesario purgar los radiadores y eliminar aquellas bolsas de aire. Eso provocará que el radiador empiece a calentarse rápidamente. No obstante, tras el purgado deberá s comprobar la correcta presión del sistema.
- La caldera no se enciende: Aunque parezca ridículo, lo primero que debemos comprobar es el enchufe conectando cualquier otro dispositivo. Si no es un problema del enchufe, será necesario comprobar que el magnetotérmico no está disparado. Si tras estas comprobaciones sigue sin encender, deberá ponerse en contacto con una empresa de mantenimiento.
- Luces que se apagan y encienden solas: En este caso aquellas calderas con pilotos de luz suelen ser bastantes antiguas. Si esta luz sigue apagándose, podría ser un termopar defectuoso que está cortando el suministro de gas. Alternativamente, podría haber una acumulación de depósitos o una corriente de aire que apague la luz.
- Otras averías posibles: Si no hemos tenido en cuenta los fallos técnicos anteriores es posible que con el tiempo provoquemos una avería de la caldera incluso mayor. Es por este motivo que recomendamos encarecidamente contratar un servicio de mantenimiento anual, lo que permite mantener la caldera en su correcto funcionamiento durante todo el año y se pueden detectar posibles fallos antes de tiempo.
Hace un tiempo también tratamos los problemas frecuentes de un circuito de calefacción y estos suelen ser los 10 problemas más comunes de las calderas. Como siempre en Tecnigrado hacemos hincapié en la importancia de realizar un mantenimiento anual a nuestras calderas. No dudes más y ponte en contacto con nosotros.